Salvar al patrimonio cultural de nuestro pais es un imperativo que no puede ser desoído. No solo porque ello preserva un bien material histórico y turístico, sino porque contribuye a formar nuestra propia identidad, a asegurarnos sobre bases sólidas para desarrollarnos como pueblo.
Por lo tanto, las personas y las instituciones que se lanzan a defender los exponentes del pasado, sean lugares, monumentos, construcciones, sectores urbanos, lo hacen convencidos de la importancia de su labor y del reditúo espiritual, patriótico y económico de la empresa.
No en vano existe un Consejo Internacional de Monumentos y Sitios, cuya sigla YCOMOS, que tiene entre manos grandes proyectos en toda América, como, por ejemplo, la preservación de la ciudad de Sucre, en Bolivia, de las Misiones Jesuísticas en Paraguay y el Alcázar de Colón en la República Dominicana.
Los técnicos argentinos, arquitectos e historiadores, concientizados por esta campaña internacional de defensa del patrimonio cultural y artístico de la humanidad, han emprendido una labor de gran trascendencia que ha generado la protección de la ciudad de Salta, el barrio de San Telmo en la Capital Federal y las Manzanas de las Luces en la misma ciudad.
Tornquist, dueña de un patrimonio histórico de gran riqueza, ha perdido gran parte de su propia identidad, como consecuencia de actos de vandalismo que se realizaron alegremente ante la indiferencia o complicidad de pueblo y autoridades de turno.
Tornquist debe incorporarse a este tipo de inquietudes.
Rodolfo Pablo Scharff
Publicado en la edición de Observador Serrano del día 29 de noviembre de 1984
Ex Club Hotel Sierra de la Ventana – Inaugurado en 1911
Sanatorio y Sala Maternal, mandada a construir por el Comisionado Municipal en el año 1909, Senador Nacional Manuel Lainez.
Demolida en agosto de 1982