En una jornada fría y gris, se realizó la 34º edición de la peregrinación al Santuario Nuestra Señora de Fátima, ubicado en Villa Serrana La Gruta.
Cientos de peregrinos procedentes de distintos puntos de la provincia de Buenos Aires, formaron parte -durante sábado y domingo- de la procesión de velas y la Santa Misa celebrada por monseñor Jorge Wagner, obispo auxiliar, y concelebrada por el párroco local Norberto López y sacerdotes de la colectividad portuguesa.
El intenso frío de hoy (domingo) no impidió que los peregrinos se hicieran presentes en la iglesia del Santuario y participaran activamente de la misa.
Los cánticos y alabanzas a Nuestra Señora de Fátima fueron una constante durante la ceremonia al igual que en el momento del Adeus, donde la imágen de Fátima es trasladada desde la iglesia hacia el Santuario.
Lágrimas en los ojos, grandes y chicos agitando pañuelos blancos ante el paso de la Virgen -mientras una tenue llovizna acompañaba el recorrido- permitió que los fieles se despidieran de la Madre de Dios.
Tras dos años de pandemia, lo cual impidió que se realizaran las peregrinaciones, permitió que muchos fieles hicieran un gran esfuerzo para viajar hasta Villa Serrana La Gruta y reencontrarse con la Virgen de Fátima.
Durante el final de la Santa Misa, las autoridades de la colectividad portuguesa agradecieron a quienes colaboran con las actividades y obras del Santuario y homenajearon a los que fallecieron en los últimos dos años.